Como se ha venido anunciando, Microsoft está próximo a lanzar Windows 8 el 26 de Octubre, y justo unos días antes de su presentación oficial, el Sistema Operativo en su nueva versión recibió una actualización acumulativa. Los nuevos parches también se aplican a Windows Server 2012, que fue lanzado los primeros días de septiembre.


En palabras de Steven Sinofsky, presidente de Windows, hay un periodo de entre ocho y doce semanas entre el RTM y el lanzamiento de un nuevo SO. Durante ese periodo Microsoft se encarga de desarrollar elementos asociados a Windows que mejoren la compatibilidad y el rendimiento frente a nuevo hardware y software que sea utilizado por los OEM en sus productos finales. Estos elementos son las actualizaciones, y aunque podrían ser aplicados a otros sistemas en general, usualmente no están al alcance del usuario final sino hasta que se entrega el primer Service Pack.

A partir de una mejora en sus sistemas de automatización de pruebas, Microsoft ha implementado un nuevo esquema “acelerando” estas actualizaciones “post-RTM”, por lo tanto, todas las copias de Windows 8 deberán estar igualmente actualizadas al momento de su debut.